Ayer estuvieron desayunando en mi jardín algunas buenas amigas, buenas maestras: Charo, Carmen, Leticia, Pilar, Tamara y Adela y para tal motivo, pues hice una tartita y como tenía ganas de hacer una tarta de porción (creo que le llaman así), aproveché el momento y así quedó.
Le añadí la pitufina más que nada, por motivos vivienciales, pues habíamos ido al cine la tarde anterior Leticia y yo con nuestras hijas, Helena y Lucía. Nos dimos unas buenas risas con la peli y a mí me sirvió para recordar que adoraba a estos entrañables personajitos azules cuando era pequeña y los leía en comic o los veía en dibujos animados.
Suelo ver este tipo de tarta con la Kitty, y en este caso, ha caído la pitufina jejeje...
Bueno, a lo que iba, que pasé un rato bastante agradable con mis amigas en lo que ya yo vengo llamando "el desayuno de las maestras", pues si mal no recuerdo, es la tercera edición jejeje.
A esta tarta tan curiosa, antes de rellenarla, se le quita una porción, que luego es la que se coloca encima, mismamente. Hice un bizcocho de vainilla relleno de crema de oreos y de ganaché de chocolate y nos gustó mucho. Desde luego me dio bastante trabajo, pues las cremas se habían templado con las calores, no pude meter en el frigo la tarta antes de cubrirla con el fondant... un jaleo, pero bueno, se comió jejejeje....